Las burbujas de embalar han existido desde
hace muchos años con el fin de proteger objetos frágiles, pero desde que se le
ocurrió a alguien que se podían explotar esas burbujas, ha aparecido una
adicción. Cuando era pequeña mi padre me regalaba esas burbujas de embalar pero
siempre se acaban explotando todas. Pocas cosas hay tan adictivas, relajantes y
a la vez estresantes como reventar esas tiras de plástico repletas de burbujas.
Pero para eso está Japón, dándonos una solución para los objetos más
chorras que se puedan inventar.
¿Harto de que se te acaben las burbujas? Aquí está el “puchi,puchi”. Ya puedes explotar y explotar burbujas que nunca se acabarán.
Si no te lo crees aquí tienes una demostración del "puchi,puchi":
Si, lo japoneses tienen una solución para todo, muchos de ellos
ya lo tienen y ahora te lo puedes llevar tú porque está ya en España.
Puedes llevarlo de llavero y así cuando estés estresado podrás
ponerte a explotar burbujas sin el miedo a que se acaben. Incluso lleva una pila
para que puedas oír el ruido de cuando se explotan las burbujas. Estos
japoneses....., piensan en todo.
Ya no tendrás que hacer reformas en casa para explotar las burbujas de
embalar. Cuando tus hijos estén aburridos y no sepan que hacer les puedes dejar
el “puchi, puchi” pasaran horas y horas explotando burbujas y ya no te tendrás
que preocupar de ellos ya que se volverán unos maniáticos.
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